Síntomas de la malformación de Chiari

Malformación de Chiari es el nombre de una condición, deformidad o mal funcionamiento que conduce a la extensión del tejido cerebral hacia el canal espinal. Esta afección se produce porque una parte del cráneo está anormalmente deformada o es pequeña, como resultado de lo cual el cráneo presiona el cerebro y éste se ve obligado a descender.

La malformación de Chiari no es muy común, sin embargo, cada vez se presentan diagnósticos más frecuentes como resultado de mejores pruebas de imagen.

La malformación de Chiari tipo I se desarrolla a medida que el cerebro y el cráneo crecen. Por lo tanto, hasta que la persona llega al final de la niñez o la edad adulta, los síntomas y signos de la malformación de Chiari no tienden a ocurrir. La malformación de Chiari tipo II es la forma pediátrica de esta afección ya que tiende a ser congénita, es decir, presente al nacer.

Los síntomas, la forma y la gravedad asociados determinan el tratamiento que se puede realizar para la malformación de Chiari. Las opciones de tratamiento incluyen medicamentos y cirugía, pero en ciertos casos no se requiere tratamiento.

Síntomas de la malformación de Chiari

La malformación de Chiari generalmente se clasifica en tres tipos, según la anatomía del tejido cerebral que se ha extendido hacia el canal espinal y la presencia de anomalías del desarrollo relacionadas con el cerebro o la columna.

Muchas personas que padecen malformación de Chiari no experimentan ningún signo ni síntoma y no requieren tratamiento. A menudo, someterse a pruebas para detectar trastornos no relacionados da como resultado la detección de su afección.

Sin embargo, pueden ocurrir numerosos problemas debido a la malformación de Chiari, dependiendo de su tipo y gravedad.

Como se mencionó, no es hasta finales de la infancia o la edad adulta cuando suelen aparecer los síntomas y signos de la malformación de Chiari tipo I.

Una ecografía durante el embarazo puede dar como resultado el diagnóstico de malformación de Chiari tipo II. También se puede diagnosticar en recién nacidos o bebés.

Malformación de Chiari tipo I

El síntoma clásico de la malformación de Chiari son los fuertes dolores de cabeza. Generalmente, la tos, los estornudos y/o los esfuerzos repentinos tienden a provocar este tipo de dolores de cabeza. Las personas que padecen una malformación de Chiari tipo I también pueden experimentar lo siguiente:**

En ocasiones, las personas que padecen malformación de Chiari también pueden experimentar lo siguiente:

Malformación de Chiari tipo II

En comparación con la malformación de Chiari tipo I, en la malformación de Chiari tipo II se desplaza mucho más tejido cerebral hacia el canal espinal.

Los signos y síntomas incluidos también están relacionados con los del mielomeningocele, una forma de espina bífida que a menudo ocurre junto con la malformación de Chiari tipo II. Una persona con mielomeningocele nace con la columna vertebral y el canal espinal no cerrados adecuadamente.

Los síntomas pueden incluir:**

Malformación de Chiari tipo III

La malformación de Chiari tipo III es el tipo más grave de esta afección en la que el tronco del encéfalo o el cerebelo, es decir, la parte inferior trasera del cerebro, se desplaza a través del cráneo porque tiene una abertura anormal. La tasa de mortalidad de este tipo de malformación de Chiari es mayor y pueden producirse problemas neurológicos a causa de ella.

Conclusión

Si aparece alguno de estos síntomas y signos de la malformación de Chiari, ya sea en el nacimiento, en la última infancia o en la edad adulta, lo mejor es someterse a una evaluación por parte de un médico. Es importante someterse a una evaluación médica exhaustiva ya que los síntomas y signos de la malformación de Chiari también pueden estar asociados con otros trastornos.